El paradigma de la fisioterapia está en permanente cambio y cada vez son más los pacientes que acuden a la clínica con patologías agravadas o susceptibles de ser abordadas a través de un modelo bio-psico-social. Lo que quiere decir que ponemos nuestro foco en todas las esferas personales y no únicamente en el problema estructural.
Todo ello ha ido desarrollándose por la necesidad de dar explicación a patrones de dolor complejo disfuncional que no se explicaban con daño estructural real.
Por lo que su abordaje tampoco ha pasado desapercibido ante dicho cambio, y ahora casi todo problema de salud es susceptible de ser tratado con educación en neurociencia del dolor y la íntima relación que este guarda con la esfera personal en cuanto a creencias, vivencias, educación previa del sujeto, emociones…o entorno social, etc.
Resumiendo: Actualmente la mayor parte del tiempo de nuestra sesión de fisioterapia trata de una entrevista clínica personal que nos ayude a encontrar la hipótesis más cercana a tu problema. Y en el abordaje fisioterapéutico -en la mayoría de los casos- mediante educación en neurociencia del dolor, así como de la realización de ejercicio físico activo y la recomendación de pautas que ayuden a gestionar el problema de forma autónoma.